Hemos visitado a nuestro hijo en Köln, su nueva residencia desde que él y su pareja decidieran compartir sus vidas fuera de España. Una nueva etapa con sus ventajas y desventajas, pero que vivida y experimentada como un reto para mejorar en todos los sentidos llega a ser una preciosa aventura con un fondo de amor que todo lo puede.


En este corto tiempo que pasamos allí también visitamos Koblenz, a una hora en coche desde Köln, donde se encuentran el Mösel con el Rhein, una estampa maravillosa de contemplar, especialmente desde el teleférico que sale continuamente y te transporta por encima del río hasta el mirador donde puedes divisar el diferente caudal de un río y otro...¡Espectacular! Allí en Koblenz degustamos un suculento almuerzo en una taberna típica alemana.
También en Köln compartimos diversión y gastronomía el viernes por la noche cenando en un típico Bier stube donde los alemanes se pueden beber 14 cervezas sin pestañear y las risas están aseguradas, debes tener en cuenta que cuando no quieras mas bebida, tienes que tapar tu copa o vaso, de lo contrario, antes de que puedas reaccionar, tendrás otra bebida en tu mesa, recuerda: si tu copa está vacía, sin tapar, quiere decir que quieres otra. Las porciones de comida son muy generosas, así que cuidado, porque lo que te sirven de comida es mas una bandeja que un plato ;))
