Hace unos años, concretamente desde que me jubilé, como tenía mucho tiempo, decidí empezar a cuidarme más en serio, por mí y por los que me rodean. Comencé con el Yoga y también con entrenamiento funcional, el resultado, después de algunos años de no faltar a mis citas deportivas no puede ser más satisfactorio. Ahora no me imagino mis días sin el ejercicio físico. Por eso, me he decidido a escribir sobre este tema, con la convicción de que hay que moverse más a medida que pasan los años, en vez de menos, especialmente en estos tiempos extraños que a muchos deprime con el resultado de quedarse quieto.
Nuestro cuerpo, ese habitáculo que ocupamos durante nuestra existencia y al que muchas veces le exigimos una respuesta positiva a pesar de enviarle continuamente mensajes negativos.
Me explico, estamos formados de huesos, músculos, vísceras, nervios y un gran etcétera que no me atrevo a enumerar pues me faltan conocimientos para ello. Lo que sí puedo constatar es que si no nos alimentamos conscientemente, si no nos ejercitamos y si lo maltratamos con productos nocivos, ese instrumento tan maravilloso capaz de tantas proezas, de tantas recuperaciones, de tantas superaciones, llegará el día que nos dirá basta, ya no puedo protegerte más, no me has ayudado a hacerlo, ahora estoy enfermo y no puedo más.
Viendo un vídeo de un fisioterapeuta, me ha llamado la atención una pregunta que hace a personas que desean envejecer lo más saludablemente posible. Pregunta: -¿Recuerdas la última vez que levantaste tu brazo por encima de tu cabeza? Seguidamente recomendaba que debemos conocer hasta dónde es capaz de llegar en diferentes movimientos nuestro cuerpo.
Es una forma de entender que si no ejercitamos a diario lo que podemos hacer, si nos quedamos sentados horas sin hacer movimientos ni estiramientos, cada vez nos podremos mover menos, nos iremos anquilosando y terminaremos llenos de dolores y medicamentos, dependiendo de otros para desarrollar nuestro diario vivir.
El movimiento no debería parar nunca, pero a partir de los cincuenta como media debería convertirse en una obligación. La jubilación con tanto tiempo libre es una oportunidad para empezar si no lo hemos hecho antes, es una forma de vivir que cuando te das cuenta de los beneficios a todos los niveles ya no puedes dejar. Hoy en día es muy habitual que los médicos te recomienden ejercitarte, pues el cuerpo está hecho para eso, lo contrario es antinatural, hoy todo lo hacemos en coche, todo son comodidades y sin darnos cuenta evitamos lo que es de vital importancia: el movimiento y el ejercitar nuestro cerebro que es otro órgano importantísimo que se beneficia tanto de la actividad física como de la actividad intelectual, si no se ejercita se relaja igual que el resto del organismo dando lugar a una ancianidad prematura y a una dependencia indeseable.
Felices Fiestas y recuerda: NO DEJES DE MOVERTE
Muy importante todo esto, Maru, es realmente así, aunque no nos pongamos a saltar como los jóvenes, tenemos que hacer movimientos para no quedar tiesos con el tiempo, mi gimnasia va desde hacer la limpieza de la casa, con prudencia siempre, hasta poner música y bailar al ritmo, además del movimiento da alegría, un abrazo grande y Muy Felices Fiestas para vos y tus seres queridos!
ResponderEliminarCorrecto, yo también bailo y limpio la casa, cuánto más activos seamos mejor. Gracias por pasarte por aquí María Cristina💝
EliminarHola Maru.
ResponderEliminarLlevo la vida entera haciendo ejercicio físico. Muchos años en yoga, hace tres he cambiado hacia un ejercicio más exigente. Y no concibo mi vida sin él.Estoy encantada.
Me alegró tu saludo y saber que estás bien.
Deseo que disfrutes de lo que nos ofreces y de todo.
Fuerte abrazo Maru.
Me lo imaginaba, Ángela, tu actitud ante la vida es tan especial que no podía ser de otra manera, eres una persona inquieta, curiosa, trabajadora, creativa y muchos etc. lo mejor que puedes hacer, lo haces, me encanta. Un abrazo y gracias por tus palabras aquí.
EliminarFelices fiestas para ti también.
ResponderEliminarMe atrevo a añadir una cosita a tus sabios y excelentes consejos. Solo que no esperen a mañana. Si han leído la entrada, que cierren el ordenador y salgan aunque solo sea a dar un paseo. ¿Porqué? —Pues porque es un hecho incuestionable que cuanto más tarden, mas les costará
Gracias Ricard, toda la razón, el sedentario o es lo que tiene, se está muy cómoda en el sillón, pero no lo vinculamos a todos los dolores que de esa forma de vida padecemos, así que cuanto antes creemos esa adherencia a movernos mejor. Te deseo unas pacíficas y saludables fiestas navideñas.
Eliminar...el sedentarismo 😉
EliminarEsta entrada revela tu gran corazón, Maru, muy sabio además. Aprovecho para desearte lo mejor, amiga.
ResponderEliminarAbrazo feliz.
Gracias Carlos, te deseo mucha salud que actualmente es un bien en alza más que nunca. Abrazo
EliminarTienes mucha razón y si no se practica uno se vuelve mas perezoso a todos los movimientos de nuestro cuerpo, yo nunca he sido deportiva, por esto siempre me ha costado hacer ejercicio aunque si que lo tengo presente y sé lo importante que es.
ResponderEliminarAprovecho para desearte unas felices fiestas con salud.
Gracias Mari, pues aunque sea bailar, caminar, subir escaleras, pero que por lo menos el tiempo en movimiento sea igual al que estamos sin hacerlo. Fuerte abrazo y mucha salud.
EliminarMe encanta que vivas y sientas en positivo. Estar jubilada es estar viva, agradecida, capaz de pensar, ayudar, compartir, y también comunicar, como lo haces. El programa de cada uno no está en los años, está en su cerebro, en su corazón y en su confianza en la vida. ¡Todo mana o dimana de ahí!.
ResponderEliminarGracias, felicidades y sigue cuidándote. Un abrazo.
Gracias José Manuel, que sigas tan reflexivo como siempre y nos sigas regalando tus artículos meticulosamente estudiados y contrastados para compartir con nosotros. ¡Salud!!!
ResponderEliminarUnas indicaciones más que necesarias que no siempre tienen cabida en nosotros. También los comentarios aciertan en ello.
ResponderEliminarAbrazos María.
Gracias por tu visita Ernesto. Tienes razón en aquello de que no tiene cabida en todos, aunque, puntualizando, cada uno, dentro de sus posibilidades sí que puede hacer algo y si se es constante, verá los beneficios, otra cosa es conseguir esa constancia. Abrazos.
EliminarGracias, Maru, por tu entrada. Tengo cerca de 80 y hace 10 meses que dejé de trabajar y hacer ejercicios, también de beber agua. Estoy preocupado pero al leerte he comenzado a ocuparme en el proceso vital de mi salud. Cierto que lo sabía pero me has conmovido. Gracias.
ResponderEliminarLindas fiestas.
Hola Vicente, entiendo que no hagas ejercicio, pero beber agua? Eso no debes hacerlo, empieza por ahí y poco a poco vas haciendo los esfuerzos que tú cuerpo te permita, tómate primero diez minutos, luego vas aumentando, pero hazlo como una disciplina que te impones a ti mismo, verás que funciona. Hay vídeos muy buenos en YouTube para personas mayores, incluso para hacer ejercicio sentado en una silla. Te deseo lo mejor Vicente, cuídate mucho, ochenta años no es tanto como para rendirnos. Un abrazo.
Eliminarhttps://youtu.be/5V6mxstDHPQ
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