Todos somos libres. Nos diferencia la forma en que elegimos ejercer nuestra libertad.
En cien años no seremos nada, nadie nos recordará, nuestra huella habrá desaparecido. Pero hoy, ocupando ese pequeñísimo espacio que la vida como la entendemos nos proporciona, nos creemos el centro del universo y no dudamos en aprovechar cualquier resquicio de opulencia, nos merecemos todo y más.
¿Qué nos ha pasado? ¿Cómo hemos derivado en tamaña desproporción? ¿En qué momento nos convencimos de nuestra superioridad? Hace muy poco que éramos más sencillos, que disfrutábamos mucho más con mucho menos, que reíamos más, hablábamos los unos con los otros, teníamos TIEMPO con menos ayudas, escribíamos largas cartas contando nuestras anécdotas y el receptor nos leía, leía nuestras letras escritas a mano a veces ilegibles, pero nos esforzábamos porque era interesante saber del otro.
Creímos falsamente que estábamos evolucionando, no está siendo así, creo yo. Hemos convertido la vida, las emociones, las virtudes y los fallos, los sentimientos, en meros espectáculos para entretenimiento de los demás, hemos digitalizado nuestras vidas para ir más rápido ¿Hacia dónde? Quizá ya no cortamos tantos árboles para hacer papel, ahora tenemos guerras y abusos por el coltán y otros minerales necesarios para continuar con nuestra falacia.
Sin duda están siendo de ayuda las nuevas alternativas, pero todo en su justa medida, sería bueno recapacitar sobre toda nuestra actualidad. Por nosotros y por las nuevas generaciones.
Hoy quiero romper una lanza por la escritura a mano, con lápiz, bolígrafo o pluma, por eso este pequeño homenaje a esos utensilios que tanto nos ayudaron y, según parece, nos siguen ayudando, pues según estudios mejora la memoria, la comprensión y la capacidad de retención. ¿Lo intentamos?
Y no nos ha pasado que al intentar escribir una tarjeta de cumpleaños la letra se va por donde quiere y no la reconocemos, justamente por lo poco que escribimos ya a mano? Un abrazo Maru!
ResponderEliminarYa te digo que voy a empezar a escribir con lápiz, bolígrafo o pluma, gracias por seguir ahí querida Cristina, un abrazo.
ResponderEliminarHola otra vez María Cristina, decirte que el comentario anónimo soy yo, pero como estoy muy desentrenada en esto pues ya no me aclaro, jajaja besos.
ResponderEliminarIrrefutable análisis. Me deja pensando tu revelador mensaje. Enbuenahora lo compartes.
ResponderEliminarAbrazo grande!!