jueves, 21 de febrero de 2019

Y ella la quiere conocer.



Ella, que disfrutó de aquel hombre que durante once años fue su padre cuando aún su nacimiento no estaba ni proyectado. 

Ahora venía de tierras lejanas con el deseo de conocer a sus...¿Hermanastros?, personas extrañas que nunca se habían visto pero que compartían la sangre del mismo hombre, qué curioso, pensó, al principio sintió rechazo, no le apetecía conocerla, pero después le picó la curiosidad como hija que no tuvo a su padre frente a la que había sido ¿Su sustituta?. 

Le podría preguntar cómo había sido el padre, cómo era su amor, cómo cuando ella fue adolescente, cómo cuando sintió su primer amor, cómo cuando ella eligió compañero, cómo cuando se comprometió, cuando se graduó, cuando tuvo su primer hijo, cómo amaba a sus nietos, cómo quiso a su nueva mujer, cuántos años vivió, qué enfermedades tuvo o si no tuvo ninguna, porqué la había abandonado, quizá ella lo sabría y se lo podría explicar, porqué nunca más quiso saber de su primera familia.

Porqué su hermana de él, su tía, le había negado su dirección cuando ella se la preguntó al tener su primer hijo para decirle que era abuelo y tuvo que dirigirse a un frío consulado para conseguir un triste apartado de correos. Porqué le contestó con aquella crueldad a la carta que le envió. 

Cómo había fallecido, cuándo...


Sí, quizá sería un acierto conocer a su hermanastra después de tantos años para así sentir, a través de ella, cómo hubiera sido su vida si hubiera tenido padre.